jueves, 27 de enero de 2011

«Basura comunista».

Ayer, al mediodía, en La Palma, localidad del municipio capitalino Arroyo Naranjo, vi como tres pobres mujeres caucásicas estaban ocupadas en la recogida furtiva de latas de refrescos y cervezas arrojadas en la vía pública. Una de ellas, temerosa, le dijo a otra que si la pillaban la multarían. Me acerqué y les pregunté al respecto y me confesaron que si un inspector las sorprendía recogiendo latas sin tener licencia oficial las podía multar.
Así de repelente es la nueva «política económica y social» que se discutirá en el VI Congreso del Partido Comunista de Cuba el próximo mes de abril. Esa escena fue tan deprimente y la bajeza que en todo sentido encierra es tal que no pude resistir emitir esta denuncia, so pena de que se concluya que es un asunto trillado.
El servicio de comunales del municipio Arroyo Naranjo es de hace varios años uno de los mas afectados en la capital. La recogida de basura allí es una tarea que se demora porque no existen suficientes vehículos, combustibles ni contenedores, medios que la Revolución asigna prioritariamente a otros municipios más «importantes», entre ellos los céntricos Plaza de la Revolución y Playa, según declaraciones de directivos de esa empresa estatal.
La recogida de latas y otras materias primas en plena calle es una tarea que muy pocos están dispuestos a realizar. Los capitalinos, en sentido general, además de sucios, somos muy arrogantes. Resulta un insulto y una falta de sensibilidad por parte de las autoridades de esta isla el hecho de que se reprima a personas que, indirectamente, están realizando labores de saneamiento que el mal nacido Estado Desnaturalizado todavía no es capaz de asumir eficientemente.
Me contó un amigo que reside en Ecuador que allí las personas que realizan trabajos como ese, y también los ambulantes, no tienen que pagar impuestos porque se supone que con su labor aligeran la carga subsidiaria que pesa sobre el Estado que lo agradece. Esa sería, también para nosotros, una solución justa pero, los comunistas de aquí no la tienen prevista.

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