En los primeros días del mes de diciembre de 2010 la indignación por la negación gubernamental de mi permiso de salida del país hizo que me decidiera protestar enérgicamente contra el régimen castrista a favor de mi derecho.
El 10 de diciembre, en horas de la mañana, me personé en la oficina territorial de inmigración correspondiente, ubicada en el municipio capitalino 10 de Octubre, para recoger la nominada popularmente Tarjeta o Carta Blanca. En esa ocasión las autoridades me informaron una vez mas que mi situación de retenido desde el verano del año 2008 se mantenía.
Inmediatamente salí a la calle y repartí unos pocos ejemplares de la Declaración Universal de Derechos Humanos entre varias personas que tramitaban en el lugar y acto seguido desplegué un cartel confeccionado por mí en el que rezaba la frase Soy Rehén del MININT. Pasada media hora fui detenido por una patrulla de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) por exigencia de un connotado esbirro de la Sección 21 del Departamento de Seguridad del Estado (DSE) del Ministerio del Interior, de los tantos que se ocupan en el enfrentamiento a opositores y disidentes. Conducido hacia la unidad de la PNR ubicada en la calle Aguilera del reparto Lawton, fui liberado al final de la tarde.
El 16 de marzo de 2011 los opositores pacíficos Roby González Torres, Lázaro Prieto Alvares, Joel Vega Caro, Carlos Hernández Rodríguez y yo nos plantamos con carteles frente a la sede de la Organización de Naciones Unidas en La Habana, sita en calle 18entre 1ra y 3ra, Miramar, municipio Playa, en señal de protesta por la arbitraria retención de nuestros permisos de salida del país.
Fuimos detenidos y conducidos hacia la unidad de la PNR ubicada en calle 7ma y calle 62, Miramar, donde fuimos interrogados y amenazados. Ese día a Roby, a Lázaro y a mí nos prometieron que nos entregarían los permisos de salida en unos quince días. Eso sí, por decisión oficial y no a causa de presión por nuestra manifestación. Los cinco fuimos soltados en horas de la noche.
Pasó el tiempo y pasó… El 28 de abril de 2011 yo no tenía aún en mis manos el indulgentazo salvoconducto. Ese día, cerca de la diez de la mañana, el Dr. Darsi Ferrer, su esposa Yusnaimy Jorge Soca y los también opositores Ricardo Aguilar y Joaquín Sarduy nos asentamos con carteles en la concurrida esquina de las calles 23 y L, en el Vedado, municipio Plaza de la Revolución, en protesta por la negación gubernamental de nuestros permisos de salida.
Detenidos y conducidos hacia diferentes unidades de la PNR, fuimos librados al día siguiente tras permanecer más de 24 horas en las mazmorras. A Yusnaimy la habían liberado cerca de la media noche de ese día. Una vez más, recibimos la promesa de que se nos entregarían los permisos.
A las tres y veinte de la tarde del 14 de mayo de 2011 dos agentes del DSE se personaron en mi hogar para informarme que a partir del siguiente lunes recibiría la Tarjeta Blanca. El lunes en la mañana, en la oficina territorial de inmigración, me dijeron burlonamente que tenía que esperar todavía «unos dííítas».
El 18 de mayo de 2011 la opositora Mercedes García Alvares y yo nos expusimos frente a la escalinata del Capitolio con sendos carteles denunciando la retención arbitraria que sufrimos en Cuba. Detenidos por la policía tras cuarenta minutos de demostración, fuimos conducidos a la unidad de la PNR ubicada en la calle Dragones, municipio Habana Vieja. Allí varios agentes del DSE nos «entrevistaron» por casi cuatro horas.
El oficial que se nombró a sí mismo Alfredo terminó conmigo invitándome a presentarnos juntos en la oficina territorial de inmigración para estar al corriente sobre mi situación. El agente se adelantó y cuando yo llegué, milagrosamente, tenía en sus manos la Carta Blanca que me entregó cuestionando mi reticencia.
Hasta la fecha no han sido liberados de la arbitraria retención Yusnaimy Jorge Soca, Ricardo Aguilar y Mercedes García Alvares. Conste que en Cuba cientos de personas esperan por los permisos de salida del país, una herramienta de coacción del gobierno cubano que amenaza con no ser suprimida.